Cuando se hacen fotos a una chica en una habitación normalmente tendemos a hacerle esas fotos mientras se quita la ropa y mucho menos frecuentemente a cuando se la pone.

No sabía muy bien como poner a Noe en esta foto, aunque tenía una vaga idea de por donde tirar. Cuando se sentó en la cama y se puso a ajustar los zapatos la imagen apareció clara y nítida delante de mi.

A veces no es tanto cuestión de ideas como de mirar medio metro delante de tus narices.

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