Usted puede ser portador de un arma letal. Sí aún el azar no le armó, lo podría hacer en cualquier momento, sin permiso, ni aviso previo y sin que usted se entere.
Un conductor o un cazador, prototipos de personas que manejan elementos peligrosos, han de superar un examen psicotécnico, tener conocimientos, destreza, permiso, seguro... y no estar ciegos. Usted nada de eso... y, además, está ciego. No ve el arma que lleva, ni a quienes dispara, ni si los deja malheridos o quita la vida. Usted no es un asesino de hecho, ni siquiera consciente, sin embargo puede asesinar en serie.
Entonces... ¿Qué puede hacer usted para evitar convertirse en asesino? Le diré algunas prácticas, según se me vayan ocurriendo, aunque probablemente usted encontrará más y mejores soluciones si medita sobre ello.

* Esté bien informado sobre las realidades del Covid-19.
* Tome conciencia de los daños que puede ocasionar en otras personas.
* Asuma que no quiere dañar a nadie y que, por el contrario, desea la salud de familiares, compañeros, amigos y ciudadanos en general.
* Responsabilicese en primer lugar en preservar su salud frente al Covid-19; así velará por la salud de los demás.
* Aflore la educación que atesore en su intelecto y el sentimiento bondadoso más cívico que albergue su corazón.
* Respete disciplinadamente cuantas normas de cumplimiento dicten las autoridades competentes por su seguridad y la del bien común.
* Evite lugares donde se concentren un número elevado de personas.
* Sí, haciendo deporte, no lleva mascarilla y se detiene para hablar con algún conocido, tenga la deferencia de hacerlo a distancia y de lado.
* En público, lleve siempre puesta una mascarilla que le cubra boca y nariz.
* No toque su propia cara ni las ajenas con las manos, si hemos puesto estas en elementos comunes y aún están sin lavar.
* Despues de tocar elementos públicos, lavese las manos concienzudamente con agua y jabón en cuanto le sea posible.
* Esmere su higiene si entra en contacto con alimentos; al tomarlos, manipularlos, cocinarlos o comerlos.
* Demuestre su buena educación con hechos. Durante la pandemia es una buena ocasión para demostrarlo. Recuerde: "Obras son amores y no buenas razones".
* Sea responsable, teniendo presente que: cuanto mayores sean los daños de la pandemia, menores serán también nuestros recursos económicos en general.
* Ruego responsabilidad a cambio de salud. Me conformo con que este escrito pueda coadyuvar a salvar una vida; la suya, por ejemplo.
A todos quienes me lean les deseo que salgan de esta pandemia con SALUD.